Hace semanas Instagram nos sorprendía con su nueva herramienta: el shoppable post, una modalidad que ofrece la venta directa desde Instagram para negocios digitales que venden productos físicos.
Su función principal es sencilla: consiste en subir una foto y etiquetar en ella el producto que aparece para que, si al seguidor le gusta, pueda localizarlo y comprarlo directamente. En resumidas cuentas, se trata de trasladar la ya conocida tienda online a la nueva plataforma de negocio de las marcas: las redes sociales. Sin duda, es una forma para que las empresas aprovechen el tiempo que invierten los usuarios en esta plataforma y acercar a estos sus productos, además de mejorar su estrategia en marketing digital.
Pero el shoppable post no es tan simple como parece, y aunque subir la imagen y complementarla con etiquetas comerciales puede parecer fácil, debemos incluir esta función en nuestra estrategia de redes sociales y buscar el mejor prisma desde el que enfocarla, con el fin de aumentar las ventas de manera real. No solo son importantes las imágenes y las etiquetas, aquí entran en juego las secuencias fotográficas, el número de tags o la cantidad de publicaciones que debemos subir para acceder a nuevas herramientas.
Además, esta funcionalidad tiene una serie de requisitos básicos que vamos a repasar:
- Tener un perfil de empresa, el perfil personal no permite este uso.
- Operar en uno de los países que integran el marco de esta plataforma.
- Tener la última versión de la aplicación actualizada.
- Ofrecer a la venta productos físicos que cumplan con los requisitos de Instagram.
- Tener conectada la cuenta con Facebook.
- Poseer un catálogo de productos en Facebook.
¿Crees que los cumples todos? ¿Tienes un negocio que apuesta por las nuevas tecnologías? ¿Tú también consideras las redes sociales un mecanismo para llegar al consumidor?
¡En Digital Embassy sabemos cómo integrar el shoppable Instagram en tu negocio para aumentar las ventas y dar a conocer tu producto!
